Reservar un hotel más barato de su precio habitual es posible. Y el ahorro no es pequeño si sabemos bien cómo buscarlo; todo ello, lógicamente, sin perder comodidad ni tener que prescindir de alguno de los servicios que ofrece el establecimiento. Viajar fuera de temporada alta, buscar con antelación o beneficiarse de algún descuento promocional son algunas de las cosas que puedes hacer para conseguir alojarte por menos dinero.
No en balde, el precio por hospedarte es, probablemente, el mayor desembolso que tendrás que hacer para disfrutar de cualquier viaje. Por tanto, si quieres saber cómo reservar un hotel más barato, te invitamos a seguir leyendo.
Reserva con antelación, infalible para encontrar un hotel más barato
Planificar tu viaje con antelación siempre te va a suponer un importante ahorro de dinero incluso en lo que respecta al transporte. Si no vas a llevar tu propio vehículo, los billetes de avión, barco, tren o autobús son más económicos si los compras bastante tiempo antes de iniciar el viaje.
Y lo mismo puede decirse del hotel. Tanto si entras en su web como si lo contratas por agencia, reservándolo con unos meses de antelación te resultará mucho más barato. La razón es obvia: los establecimientos buscan asegurarse de que van a tener huéspedes y para ello prefieren ofrecer sus habitaciones a precios más económicos.
Además, en función de cada hotel, estos descuentos pueden ser muy interesantes. Llegan incluso a un treinta por ciento del precio de la habitación, lo cual, si vas a estar varias noches, abaratará considerablemente el precio de tu viaje.
Por otra parte, reservar con antelación nunca te va a suponer un perjuicio. Si por algún motivo luego no puedes viajar, los hoteles te permiten anular la reserva casi hasta última hora sin ningún coste por tu parte o con una mínima penalización.
O hazlo a última hora
En sentido contrario, también puedes encontrar importantes descuentos en las ofertas de última hora.
Justamente esas anulaciones a que aludíamos hacen que los establecimientos hoteleros dispongan en el último momento de habitaciones libres. Como ya no tienen tiempo para que vuelvan a ser reservadas, las ponen en el mercado a bajo coste. De este modo, recuperan algo del dinero que perderían teniéndolas vacías.
Viaja fuera de temporada
Un buen truco para que tu alojamiento resulte más barato es viajar fuera de temporada, es decir, cuando sea baja en la zona a la cual vas a ir. Ten en cuenta que, durante los meses de más demanda, los hoteles se encarecen, en algunos casos hasta el cien por cien. Sin embargo, organizando tu viaje en temporada baja, ahorrarás mucho dinero.
Es verdad que hay destinos de playa a los cuales no podrás ir en invierno si quieres disfrutar del mar.
Pero cuando tu viaje es de tipo cultural o, simplemente, no eres aficionado a tomar el sol y bañarte, poco te importa viajar en invierno.
Por ejemplo, imaginemos que quieres conocer Burgos, una de las ciudades más bonitas de España. Nada pierdes con visitarla en primavera u otoño en vez de hacerlo en verano. Tanto en unas fechas como en otras, podrás ver su preciosa catedral gótica, sus murallas o su arco de Santa María. Más aún, seguramente podrás hacerlo con más tranquilidad en las fechas que te indicamos, ya que en verano hay muchos más turistas.
No viajes en fin de semana
Se trata de un truco parecido al anterior pero que te brinda menos posibilidades salvo en viajes de poca duración. Prácticamente todos los hoteles del mundo son más caros los fines de semana que en días laborables. La razón es muy sencilla: en los primeros tienen más demanda de habitaciones. Por tanto, si el viaje que planeas no va a ser muy largo, hazlo de domingo a jueves. Verás que ahorras una buena cantidad de dinero.
Sé flexible con tus fechas
Relacionado con los dos puntos anteriores, también es interesante que seas flexible con las fechas que has programado para tu viaje. Es posible que en ellas no encuentres ofertas interesantes, pero sí las haya unos días antes o más tarde. Por eso también es importante que planifiques tu viaje con antelación. De esa forma, podrás cambiar tus fechas con más facilidad.
Prolonga tu estancia
Aunque parezca un contrasentido, si prolongas tu estancia en un hotel puedes obtener alguna ventaja. Te hablamos, por ejemplo, de establecimientos que regalan una noche por cada tres o cinco de estancia. Es bastante frecuente, sobre todo en temporada baja. De este modo, podrás disfrutar de un día más de viaje sin tener que pagar por dormir o cada noche de alojamiento te saldrá más barata, según como lo mires.
Juega con las distancias
En la inmensa mayoría de las ciudades, sobre todo en las turísticas, los hoteles céntricos o cercanos a la playa son bastante más caros que los demás. Por ello, un buen truco para reservar un alojamiento barato es buscarlo un poco a las afueras.
Lógicamente, no se trata de reservar tu estancia a veinte kilómetros del centro de la ciudad a la que vas a ir. Entre otras cosas porque todo lo que vas a ahorrar en el hotel tendrás que gastarlo en transportes. Pero, a veces, un establecimiento que se halla a quince minutos a pie del centro de la ciudad tiene un precio bastante más interesante que otro situado a cinco.
Aprovecha las promociones
Los hoteles lanzan promociones cada cierto tiempo y por diferentes causas. Por ejemplo, piensa en uno que ha estado cerrado durante unos meses por reforma. Normalmente, hará una oferta de reapertura con precios más baratos para volver a captar la clientela que haya podido perder.
En todas las ciudades grandes y zonas turísticas hay muchos hoteles y casi siempre hallarás uno que se encuentre en esa situación o en otra análoga. Es cuestión de que busques bien. Por si fuera poco el ahorro de dinero, en esa circunstancia también podrás disfrutar de un establecimiento prácticamente nuevo.
Contrata paquetes vacacionales
Normalmente, cuando reservas un viaje de manera íntegra, es decir con desplazamientos, estancia e incluso comidas, te sale bastante más barato que si contratas cada cosa por separado. Te hablamos de los famosos paquetes “vuelo + hotel + pensión completa” o de los “todo incluido”.
Los operadores de viajes tienen pactos con los hoteles para conseguir mejores precios que ofrecer a sus clientes. Ten en cuenta que no es lo mismo para un establecimiento contar con un huésped individual que tener garantizados cientos a lo largo del año. Por eso ofrecen precios mucho más bajos a esos operadores.
No obstante, en estos casos te aconsejamos que leas la letra pequeña. No sería la primera vez que un hotel cobra lo mismo por la habitación en un paquete vacacional que contratándola por separado. Para asegurarte, lee bien toda la oferta completa que te hacen y luego entra en la web del hotel para comprobar sus precios. Normalmente, será más económica para ti la primera, pero siempre hay sorpresas.
Sírvete de los buscadores
Si vas mirando las webs de cada hotel uno por uno, lo más probable es que acabes aburriéndote e incluso perdiéndote con tantos datos. Por ello, lo mejor es que aproveches los buscadores que hay en Internet.
Son portales que te permiten ver con una sola consulta todos los precios de un alojamiento. Te hablamos de buscadores como Booking o Trivago, pero hay otros muchos.
Sin embargo, una vez más tenemos que decirte que no te confíes. Hay veces que la propia página del hotel tiene mejores precios que esos buscadores. No es habitual, pero ocurre sobre todo cuando consultas establecimientos de ciudades poco turísticas. De hecho, a nosotros nos ha sucedido en alguna ocasión.
Ten en cuenta que las webs donde se muestran las mejores ofertas ganan dinero por cada una de esas consultas y estas son mucho más numerosas para los lugares más turísticos. Por eso, no se preocupan tanto por actualizar los mejores precios de hoteles que están en las ciudades donde la demanda es escasa.
Fidelízate a los programas de las grandes cadenas hoteleras
Si viajas a un destino concreto frecuentemente o te hospedas muchas veces en hoteles de la misma cadena, apúntate a sus programas de puntos o de fidelidad. De esta forma cuando vayas, por ejemplo, a otra ciudad que tenga un establecimiento de esa misma cadena, te harán un precio más ventajoso.
En conclusión hallar alojamientos más baratos es posible. Incluso puedes hospedarte en un establecimiento de lujo pagando bastante menos dinero de su precio real. No obstante, cuando hayas conseguido tu mejor oferta, una vez más revisa la letra pequeña. Hay establecimientos que te ofrecen la habitación muy económica y luego te cobran suplementos por todo, desde las sábanas hasta las toallas pasando por el jabón. Al margen de esto, para hallar hoteles más baratos, todo es cuestión de saber cómo funciona la política comercial del sector. Y, sobre todo, de aplicar las pautas que te hemos mencionado.
Anímate a probarlas y verás los resultados.